TESTIMONIO

TESTIMONIO:

Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz (2 Corintios 11: 14).

Atiende bien:

Desde el año 2015 a la fecha los demonios de la Nueva Era visitan el lugar donde yo vivo, y lo hacen mientras duermo, he soñado con ellos en varias ocasiones, esos espíritus iluminan mi cuarto, todo se pone de color blanco, entonces yo me cubro la cara con la sabana y la frazada para no ver la presencia que está en la pieza, pero ese color blanco radiante traspasa la sabana y la frazada, además puedo notar que una presencia gigante se ubica junto a la cama.

Yo arriendo una pieza en una casona antigua de dos pisos en Santiago centro, el primer piso mide más de tres metros de altura. Y yo he notado que esos espíritus son gigantes casi llegan al techo.

En mis sueños yo me cubro la cara y los reprendo, es una lucha de varios minutos, luego despierto y veo el cuarto oscuro pero en el techo observo a un animal con forma de tortuga que parece estar escapando.

El diablo se cree Freddy Krueger, y me quiere matar mientras duermo; pesadilla en Santiago de Chile. Esa presencia gigante es Sanat Kumara.

Que Jehová reprenda al diablo.

Antes lo veía de otra manera, ahora lo veo de esa forma. Y eso sucede porque el futbolista masón continúa con su guerra espiritual, sigue haciendo brujería.   

Una pesadilla es un ensueño que puede causar una fuerte respuesta emocional, comúnmente miedo o terror, aunque también puede provocar depresión, ansiedad y una profunda tristeza.                                  

La pesadilla puede contener situaciones de peligro, malestar o pánico físico o psicológico. Regularmente, las personas que la sufren, se despiertan en un estado de angustia y con imposibilidad de regresar al sueño por un prolongado periodo de tiempo. Las pesadillas recurrentes que interfieren en los patrones de sueño y causan insomnio pueden requerir de ayuda médica.

Pesadilla es un sueño desagradable que produce angustia, ansiedad, miedo o terror.

Los maestros ascendidos, y los guardianes del universo miden 2, 3 y 4 metros de altura. Cuando estoy durmiendo los veo gigantes, pero cuando estoy despierto veo que esos demonios son del tamaño de una tortuga.

Ya estoy curado de espanto. Yo tengo bajo mis pies a ese diablo cobarde. La sangre de Cristo tiene poder, el Espíritu Santo me guarda y me ayuda, Jesucristo es mi Señor.

Al hechicero no dejaré que viva. Que la ira de Jehová descienda sobre ese futbolista. Amén.

Jesucristo me llamó para ser su siervo, entonces no me voy a rebajar en querer ser presidente del Perú. Ese futbolista y la presidenta están juntos, son socios en la brujería y en la delincuencia. Asociación ilícita para delinquir.

La princesa es mujer de Satanás, no es agnóstica es masona.

El apóstol Pablo le dijo a los romanos en una de sus cartas:

Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.

Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz. Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.

Más vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del pecado, más el espíritu vive a causa de la justicia.

Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.

Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne; porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor,  sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!

El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.

Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿para qué esperarlo? Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.

Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.

Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.

Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.

Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.

¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es con nosotros, ¿quién contra nosotros?

El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.

¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?

Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos contados como ovejas de matadero.

Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

Gloria a Dios, Jesucristo es mi Señor.

Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo de vosotros; pero quiero que seáis sabios para el bien, e ingenuos para el mal. Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros  (Romanos 16: 19 – 20).

Atiende bien:

Anulo toda obra de maldad en mi contra, anulo toda trampa mortal que exista contra mí, anulo toda sentencia de muerte contra mi persona, anulo toda obra de las tinieblas. Anulo principados, potestades, y huestes espirituales de maldad. Anulo a todos los espíritus inmundos.

Anulo todo espíritu de masonería, de santería, de apostasía, de brujería, y de hechicería.

Anulo encantamientos, los anulo y los arrojo al abismo, en el Poderoso Nombre de Cristo Jesús. Y pido a Jehová que derrame bendición sobre mi vida, mi salud, y mi ministerio.

Doy gracias al Dios Padre, al Dios Hijo, y al Dios Espíritu Santo. Amén.

Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia, completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre (Filipenses 2: 1 – 11).

El predicador verdadero predica lo que vive, aquí doy testimonio.

Yo amo a Dios, y amo a la iglesia, predico para que ustedes alcancen                            el conocimiento que agrada al Señor. En mis pruebas y aflicciones tengo paz, estoy orando por la iglesia, y pido a la iglesia que también ore por mí.

La gracia y la misericordia del Señor Jesucristo sean con todas las congregaciones de Santiago de Chile. Amén.

Por eso:

Toda la Honra, la Gloria y la Alabanza son para el Señor. Padre de mi Señor.

Amén.

Mateo 10: 36 – 38

Y los enemigos del hombre serán los de su casa. El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.

Atiende bien:

Mi familia y mi ex mujer son mis enemigos. Ellos odian al Señor Jesucristo y también me odian a mí. No soportan que yo sea evangélico, ellos se burlan de Dios.

Mi padre, mis hermanos, mi ex mujer y sus dos hijos se asociaron y me declararon la guerra, ellos blasfeman y calumnian, y lo hacen por redes sociales, usan Whatsapp y Facebook. Mis enemigos blasfeman y yo les predico para que se arrepientan y se conviertan.

El problema se complicó más cuando se unieron a ellos otras personas con distintas religiones y creencias: ateos, agnósticos, católicos, masones, santeros, y evangélicos apostatas. Legiones de chismosos, y legiones de demonios contra mí.

Que Jehová los reprenda.

No se quieren arrepentir, mi familia y mi ex mujer encontraron a un calumniador millonario. Es un futbolista reconocido que se convirtió en líder.

Se presentó como filántropo y prometió ayudar a los hijos de mi ex mujer, ese futbolista es anticristo paga para que la blasfemia continúe. Dice que estudia masonería  y también dice que Jehová es hipócrita.

Ese tipo tiene una psicología homosexual, es cómplice de drogadictos, de homosexuales, y de ladrones. Es coaching de los hijos de mi ex mujer.

Coaching, anglicismo que procede del verbo inglés to coach, quiere decir “entrenar”. Es un método que consiste en acompañar, instruir y entrenar a una persona o a un grupo de ellas, con el objetivo de conseguir cumplir metas o desarrollar habilidades específicas.

Ese futbolista es satanista, practica la hechicería y se convirtió en cómplice para realizar encantamientos.

A la hechicera no dejarás que viva (Éxodo 22: 18).

Ese tipo lleva dos años como coaching, todos los meses envía dinero a sus dirigidos, y a eso le llama filantropía. También dice que cuando terminen sus rituales, a mí me dará una propina.

Se cree el dueño de mi vida, y me juzga todos los días.

Ese futbolista cometió los siguientes delitos: Injuria, discriminación racial, acoso  sexual, acoso laboral, daño moral, hostigamiento, estafa, daño psicológico, y violencia intrafamiliar; pues le paga a mi familia para que me insulten.

Ese masón no respeta los derechos humanos. Yo sufro de colon irritable y ellos lo saben por eso continúan, me quieren matar.

El término dignidad deriva del vocablo latín dignitas, y del adjetivo digno, que significa merecedor, valioso, con honor. La dignidad es la cualidad de digno e indica, por tanto, que alguien es merecedor de algo, hablamos de respeto.

La dignidad humana es un valor y un derecho inviolable, importante y fundamental. Todas las personas pueden cambiar y mejorar sus vidas ejerciendo su libertad y tomando decisiones correctas.

La dignidad se basa en el amor, respeto y la estima que una persona tiene de sí misma y es merecedora de ese respeto por otros porque todos merecemos respeto sin importar cómo somos.

Tenemos que reconocer y aceptar las diferencias de cada persona y luego tolerar esas diferencias, de esa manera las personas podrán sentirse dignas y libres.

Atiende bien:

El Señor Jesucristo pagó el precio y salvó mi alma. Dios me guarda. Amén.

Mi dignidad no vale una propina, mi dignidad vale más de cien millones de dólares. No busco reparación civil tampoco busco indemnización, no me interesa el dinero, mi corazón está en la palabra de Dios.

Yo busco justicia, ese futbolista blasfemó contra el Espíritu Santo y no se quiere arrepentir, no se quiere convertir, es feliz con Satanás, dice que estudia masonería y que Jehová es hipócrita. Ese tipo es vanidoso y soberbio, dice que es un hombre exitoso.

La denuncia es espiritual, Jehová me escucha y me ayuda.

Yo puedo perdonar la injuria y la discriminación, pero nunca voy a perdonar la blasfemia.

Yo vivo de mi trabajo, soy operario de producción en una empresa, yo trabajo.

El obrero es digno de su salario.

No oprimirás al jornalero pobre y menesteroso, ya sea de tus hermanos o de los extranjeros que habitan en tu tierra dentro de tus ciudades (Deuteronomio 24:14).

Jesucristo es mi Señor, y el Espíritu Santo es mi vida. Yo vivo gracias a Dios.

El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. El te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y adarga es su verdad.  No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya.

Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará. Ciertamente con tus ojos mirarás, y verás la recompensa de los impíos. Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación, no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán para que tu pie no tropiece en piedra. Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.

Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación (Salmos 91).

Jehová es mi Dios.

Toda la Honra, la Gloria, y la Alabanza son para el Dios Padre, el Dios Hijo, y el Dios Espíritu Santo. Amén.